A estas alturas, los beneficios de vivir con mascotas para quienes disfrutan de ellas son innegables. No obstante, hay un aspecto que nunca debemos dejar pasar: la higiene en el hogar. Para ayudarte en esto, te mostramos algunos consejos para limpiar tu casa si tienes mascotas.
Las mascotas que encabezan la lista de popularidad son los perros y los gatos. Son adorables y pueden traer mucha felicidad y cariño tanto a niños como a adultos. No obstante, también suelen ser portadores de suciedad y bacterias; es una consecuencia inevitable de su pelaje y su modo de vida.
Puesto que nuestro organismo funciona diferente al de ellos, es necesario que tomemos ciertas medidas para preservar la higiene de nuestro ámbito. Los siguientes consejos apuntan precisamente a eso: aprende cómo limpiar tu casa si tienes mascotas.
Trucos para limpiar tu casa si tienes mascotas
Para poder combinar perfectamente el hecho de tener una mascota que te acompañe y un hogar saludable, te recomendamos seguir estas sugerencias:
1. Conserva sus elementos limpios
Aunque no es necesario lavar el plato y el bebedero del perro junto con la vajilla que usamos nosotros, sí hay que hacerlo periódicamente para evitar la acumulación de bacterias, y hasta moho. En cuanto a estos objetos, lo mejor es no ubicarlos en la cocina: recuerda que pueden almacenar restos de pelos y baba.
Asimismo, si tu perro o gato tiene una camita, procura que sea de material impermeable. De este modo, podrás aplicar agua o trapos húmedos para una limpieza más efectiva.
2. Cuida tu sofá de la suciedad
Hay animales que se adueñan de todo a su paso. El sofá, generalmente, suele ser su primera conquista. Debemos considerar que se trata de una superficie en la que pueden quedar adheridas muchas partículas, como pelo.
¿De qué manera evitar padecer estas consecuencias? Tienes dos caminos: el primero es comprarle a tu mascota un mini sofá para que lo convierta en su espacio de relajación y descanso.
La segunda, en caso de que lo primero no sea de su agrado o ya es demasiado tarde para habituarlo a que lo use, es comprar un protector para el sofá. Luego, solo te bastará con lavarlo semanalmente para mantener la zona despejada de partículas nocivas para tu salud.
3. Cuidado con los productos
Muchas veces, los humanos tenemos problemas de salud causados por los fuertes químicos de algunos productos de limpieza. ¿Te imaginas el efecto que estos pueden causar en un perro, cuyo olfato es mucho más sensible?
Por este motivo, es sumamente recomendable que tengas cuidado con los productos que compras. Puedes consultar en una veterinaria o en una tienda de productos de limpieza sobre artículos que sean aptos para usar cuando hay animales de compañía habitando la casa.
Si prefieres buscar opciones más naturales, no te olvides del bicarbonato de sodio, el vinagre blanco, la sal, el limón, entre muchos otros. Son la mejor opción para muchos problemas; te serán perfectamente útiles para limpiar tu casa si tienes mascotas.
4. Báñalos periódicamente
Cada animal y cada raza tiene una frecuencia recomendada para los baños. En ese sentido, los gatos pueden —y deben— pasar más tiempo sin un baño.
En cambio, los perros sí necesitarán uno de manera periódica. De todas maneras, tampoco es bueno que te excedas, ya que ciertas razas, como por ejemplo el Shar Pei, apenas necesitan un par de baños al año.
La mejor medida para estar bien informado es consultar al veterinario para conocer específicamente los requerimientos de tu mascota en este área.
Por otra parte, no te olvides de su pelo. Cepilla a tu mascota periódicamente y también aspira alfombras y otras superficies en las que pueden quedar acumulados sus pelos, sobre todo en las épocas de muda.
Finalmente, si tu perro sale al patio con asiduidad, no sería mala idea lavarle rápidamente las patitas antes de dejarlo entrar a la casa. Si te dejas un recipiente con agua cerca de la entrada y una toalla para secarlo, lo harás en cuestión de minutos. Recuerda premiarlo si se comporta y se deja limpiar.
5. Combate el mal olor
Algo que suele ocurrir en hogares con mascotas es que los olores del animal se van acumulando por toda la casa. Por supuesto, esto no contribuye a la higiene de una casa, ni tampoco a la salud de sus dueños.
Para evitar este problema, el consejo número uno es el de bañar la mascota regularmente, como comentamos antes. No obstante, puede que con esto no sea suficiente.
En ese caso, puedes valerte de elementos como el bicarbonato de sodio, el vinagre o incluso el alcohol para limpiar muebles y otras superficies a fondo. Asimismo, también puede serte útil combinar estas sustancias con limón o un desodorante natural muy potente. Las flores aromáticas son otra gran idea; por ejemplo, el romero o la lavanda.
Con estas sencillas sugerencias, podrás limpiar tu casa si tienes mascotas y convivir sin ningún problema en un ambiente sano. Recuerda que la limpieza periódica y evitar la acumulación de objetos y suciedad es primordial.
Texto: Fernando Clementín. Blog Mejor con salud